La Asociación de Surtidores de Santa Cruz (Asosur), dice que los volúmenes de combustible que se distribuyen no guardan relación con la demanda real del departamento. YPFB niega ese extremo, observa especulación y pide a la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) la intervención de estaciones de servicio que esté desviando carburantes.
En un comunicado, la institución que afilia a los propietarios de gasolineras en Santa Cruz, señaló que desde 2022 se observa e incluso se ha reportado a las entidades públicas encargadas de la regulación y suministro de combustibles, que los volúmenes asignados no corresponden con la demanda real en el departamento, "lo cual a generado y genera a diario interrupciones en la comercialización regular, continua e ininterrumpida de combustibles afectando la disponibilidad de estos las 24 horas del día, los siete días de la semana y durante los 365 días del año”, precisó.
El comunicado agrega que las estaciones de servicio facilitan el transporte de este insumo, pero frecuentemente enfrentan retrasos significativos en las plantas de despacho que, en diferentes ocasiones, causaron que la distribución se inicie en horarios inusuales, como las tres de la mañana.
El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, en una entrevista con el programa No Mentiras de PAT, negó que exista un menor despacho y garantizó que Santa Cruz recibe los volúmenes de carburantes en función a la demanda habitual.

“El Prode (Producción y demanda) determina cuál va a ser la producción y la demanda, y de acuerdo con eso en Santa Cruz no debería haber una sola fila en estaciones, porque el despacho es normal. Hay un tema político, actores políticos de Chapare que lanzan temas de desabastecimiento, se habla de que los buques no están descargando, mentira. Ayer, en Arica, descargamos buques de gasolina, hoy de diésel, lo que se busca es generar inestabilidad política”, lamentó.
Resaltó que no existe ningún problema, se cumple con los pagos mensuales y si hay filas de camiones en Paraguay y Argentina para cargar el combustible, es porque se priorizan las descargas en Arica.
Según el presidente de YPFB la demanda por día en Bolivia es de seis mil a siete mil metros cúbicos por día de gasolina y un volumen similar de diésel, de eso, en Santa Cruz se demanda unos dos mil metros cúbicos y se cumple a cabalidad con los despachos en función a esos requerimientos.
Explicó que el día del Censo, cuando no hubo circulación de vehículos, la carga en estaciones de servicio, debería reducirse en un 14% en Santa Cruz, sin embargo, sólo disminuyó en 1,6%. En La Paz, bajó en 13,6%, en Cochabamba en un 5%.
De manera inusual, hay una mayor demanda de las gasolineras en las rutas al norte de Santa Cruz.
“Algo hay, hay estaciones de servicio especialmente hacia el norte de Santa Cruz que han llegado a subir la demanda en 180%, algo raro está pasando y desgraciadamente cuando el precio de petróleo está alto y eso quiere decir que, al otro lado de frontera, se vende más caro y hay gente que busca ganar”, observó.
Para Dorgathen hay contrabando y se está desviando el combustible hacia el narcotráfico en el Chapare y a otras actividades ilícitas, por eso es que se debe analizar con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) las sanciones correspondientes.
“Hay que analizar con la ANH las sanciones correspondientes, yo creo que hay que comenzar a intervenir surtidores que están especulando y que están haciendo estos comunicados con un tinte político, sacar un comunicado cuando no hay problema. Siempre di la cara cuando hay problemas, siempre fuimos sinceros, pero, en este momento, Santa Cruz no tiene ningún problema”, recalcó.
Añadió que se debe controlar a dónde va el combustible, porque no está llegando en un 100% a la población. “No digo que sean todos los surtidores, pero si el diésel se vende acá en 3,72 bolivianos y puedo llegar a vender afuera en siete u ocho bolivianos, es otra situación. Es un negocio y hemos visto un incremento desmedido en la demanda de algunos surtidores”, aseveró.
Explicó que si hay especulación, YPFB se ve obligada a incrementar los despachos, si se entrega habitualmente dos millones a Santa Cruz, se tiene que subir a 2,2 millones, y los días posteriores reducir a 1,9 millones, pero el problema es que normalizado todo, esos volúmenes adicionales no retornan al mercado.
Fuente: Visión 360