Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) realizó la adquisición de datos en 12 pozos ubicados en el área Bermejo-Toro y apunta a una reactivación petrolera, informó el presidente de la petrolera estatal, Armin Dorgathen.
La actividad se realiza en el marco de la primera campaña de intervenciones en 29 pozos seleccionados del portafolio de campos maduros o cerrados, con oportunidades de reactivación de producción de YPFB.
“Las operaciones permitieron efectuar la corrida de registros eléctricos de última generación en los pozos seleccionados, con la finalidad de obtener información del estado actual de las condiciones mecánicas subsuperficiales y niveles con saturación de hidrocarburos en pozos con oportunidades de reactivación en reservorios petrolíferos”, explicó Dorgathen.
Culminadas las operaciones en esta área, se realizará la reevaluación técnica de los resultados, escenario que permitirá ingresar a una segunda campaña de intervención de pozos con el objetivo de probar los niveles de interés identificados y que permitan incrementar la producción de petróleo en el campo Bermejo –Toro, ubicado en el departamento de Tarija.
“A partir de la información adquirida, la reevaluación tomará un par de meses, paralelamente, se realizarán procesos de contratación para la realizar la segunda campaña de intervenciones en los pozos seleccionados. Tenemos altas expectativas en corto plazo para la producción petrolera y que estos volúmenes puedan ingresar pronto al sistema de producción nacional”, manifestó Dorgathen.
El área Bermejo-Toro produce petróleo desde los años 1920. Pese al estado de madurez, aún pueden existir reservas no drenadas o remanentes que no pudieron ser identificadas con la tecnología disponible en años anteriores. Por esa razón se invierte en tecnología de última generación para encontrar volúmenes de hidrocarburos aún no descubiertos y explotados.
Campos
El vicepresidente de YPFB, Enzo Michel, informó el martes en Piedra, Papel y Tinta de La Razón, que se gestiona la trasferencia de otros dos campos petrolíferos, el de Monteagudo en Chuquisaca, y el de Cambeiti, en Santa Cruz. El objetivo es obtener mayor petróleo para producir combustibles.
En ese marco, la petrolera estatal transfirió las operaciones de las áreas Mamoré I y Surubí y que a partir del 1 de julio desarrolla las actividades con el desafío de mantener y generar una producción mayor a la actual que es de 1.050 barriles de crudo por día.
El proyecto “Servicio de adquisición de datos en campos maduros” se enmarca en los objetivos estratégicos de YPFB y el Plan de Reactivación del Upstream, con la finalidad de llevar adelante una reevaluación técnico-económica de cada uno de los proyectos en campos maduros o cerrados que permitan reactivar pozos de petróleo y gas en un escenario de complejidad geológica y heterogeneidad de los yacimientos de petróleo en un campo maduro.
Las oportunidades en desarrollo están enfocadas en la reactivación de campos maduros productores de líquidos, principalmente.
Fuente: LaRazon